(Pintura de M Ruiz Blanco)
Cuando la piel regrese
(Soneto en alejandrinos )
Era su tacto un filtro para
morirse suave,
como un ungüento cálido de bienoliente
estela,
era el lamer del viento sobre
el gabán del ave…
sobre la tez del agua… sobre
la inhiesta vela.
Era su roce al labio
embaucador jarabe,
una bruñida trama de tornasol
canela,
era cual mar somera para la
hendida nave…
una encubierta garra con
guante de franela.
Cuando la piel regrese hasta la
piel que ama,
cuando el reloj transite con
palpitar inverso,
cuando su seda torne para
vestir mi cama…
cuando retoce el mármol sobre
el tejido terso,
le obsequiaré el rescoldo que
resistió a mi llama
y la caricia amable que le
guardé en mi verso.