Amordazando el llanto
(Soneto)
Es complicado amordazar el llanto,
aplacar el sonido del lamento
para que el ángel que a mi lado siento
no sospeche en la noche mi quebranto.
Al corazón que tanto amó, suplanto
y acallando un prohibido sentimiento
voy confinando en mi suspiro el viento
de ese huracán que en la pupila aguanto.
Por un instante me retorna cálida
esa presencia de tu voz lejana,
esa terneza de tu mano pálida
y en tu recuerdo mi martirio sana…
mas la seda que envuelve mi crisálida
me despierta empapado en la mañana
(Soneto)
Es complicado amordazar el llanto,
aplacar el sonido del lamento
para que el ángel que a mi lado siento
no sospeche en la noche mi quebranto.
Al corazón que tanto amó, suplanto
y acallando un prohibido sentimiento
voy confinando en mi suspiro el viento
de ese huracán que en la pupila aguanto.
Por un instante me retorna cálida
esa presencia de tu voz lejana,
esa terneza de tu mano pálida
y en tu recuerdo mi martirio sana…
mas la seda que envuelve mi crisálida
me despierta empapado en la mañana
A veces también se llora sin lágrimas, ese llanto profundo que nadie ve, pero que pesa tanto.
ResponderEliminarUna belleza, Luis.
Besos!
Gracias, mi querida Carmen, por tu preciada visita a este soneto tan especial para mí.
EliminarBesos.
Precioso poema Luis, tan románico, tan nostálgico... envuelve.
ResponderEliminarUn abrazo
No te imaginas, Julia, la alegria tan grande que me ha causado tu visita y tu comentario a este soneto.
EliminarTe estoy muy agradecido...mucho.
Besos, amiga.